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VALENCIA. El PSPV-PSOE prefirió en la última campaña electoral alejarse de los recintos tradicionales para el acto central en el que debían intervenir Ximo Puig y Elena Valenciano. La Plaza de Toros de Valencia o la Fuente de San Luis, escenarios en otras ocasiones utilizados por los socialistas valencianos, fueron descartados para apostar por un espacio de carácter más abierto dado que, además, debía servir de escenario para la llamada ‘Fiesta de la Rosa'.

Según ha podido saber este diario, uno de los lugares que los socialistas tantearon para celebrar el mitin fue el Tinglado 2 de La Marina Real. De hecho, sobre este asunto llegaron a conversar Pablo Landecho, presidente del Consorcio Valencia 2007, y el portavoz municipal y secretario general del PSPV en la ciudad de Valencia, Joan Calabuig. Sin embargo, no hubo acuerdo para ceder el espacio para este mitin debido a que se iban a acometer obras de forma inminente, según señalaron distintas fuentes.

No obstante, los que sí celebraron semanas después, ya pasadas las elecciones, una multitudinaria asamblea en ese espacio fueron Podemos, que congregaron a varios cientos de personas el pasado domingo 1 de junio. Fuentes de la formación admitieron no haber contactado con el Consorcio Valencia 2007 ni comunicado a Delegación del Gobierno su intención de celebrar esta reunión. De hecho, desde el Consorcio aseguraron "no tener constancia" de que iba a celebrarse el encuentro de Podemos, que lograron lo que no había conseguido el PSPV: utilizar el Tinglado 2 para un acto multitudinario.

El procedimiento de comunicación a Delegación del Gobierno para concentrarse o manifestarse en lugares públicos debe realizarse si se prevé un encuentro de más de 20 personas. El plazo de antelación para solicitarlo es de diez días, aunque puede llegar a pedirse 24 horas antes y en el citado permiso debe reflejarse el motivo de la concentración, los datos del convocante, número de personas que calculan que pueden acudir... La Delegación del Gobierno puede modificar alguno de los supuestos o incluso prohibirlo en algún caso excepcional, si bien se conceden por regla general, según señalaron a este diario fuentes de la institución. En un caso como el de Podemos, donde se realiza una convocatoria a través de redes sociales, las autoridades suelen hacer un seguimiento de la concentración de carácter preventivo.