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MADRID (EFE). La Seguridad Social registró un superávit de 4.602 millones de euros hasta el mes de febrero, lo que supone un 16,81% menos respecto al mismo periodo del año anterior. De esta manera, sus cuentas repican la tendencia a la baja con la que cerró 2009, cuando el paro provocó una disminución del superávit del 41%. 

De acuerdo con los datos del ministerio de Trabajo e Inmigración, el superávit acumulado en lo que va de año supone el 0,44% del Producto Interior Bruto (PIB) y fue resultado de unos ingresos de 20.354 millones de euros (un 0,35% menos que el año anterior), frente a unos gastos de 15.752 millones de euros (aumentaron un 5,76%).

Del total del gasto no financiero de la Seguridad Social, el 93,83% (14.781 millones de euros) fue por prestaciones económicas a familias e instituciones y, de ellos, la mayor partida (14.132 millones) correspondió a pensiones y prestaciones contributivas, que crecieron el 5,45% en un año.

Los gastos previstos pendientes de imputación presupuestaria, según Trabajo, alcanzarán un importe de 600 millones de euros, lo que implica la disminución del superávit a esta fecha.

Para el secretario de Estado de Seguridad Social, Octavio Granado, después de terminar el año "más duro de la crisis", el superávit es "muy ligeramente" superior al previsto inicialmente en el presupuesto.

En opinión de Granado, en 2010 la Seguridad Social tendrá "equilibrio de sus cuentas", y a partir de 2011 será cuando reflejen la mejoría de la situación económica "con un incremento de los excedentes, de los beneficios del sistema que garantizarán las futuras pensiones de los españoles".

LAS COTIZACIONES SOCIALES SUPERARÁN LOS 100.000 MILLONES

La Seguridad Social prevé ingresar este año 107.376 millones por cotizaciones sociales, con lo que los ingresos por este concepto representan a finales de febrero el 16,43% de los previsto para todo 2010.

Hasta este momento, el 91,21% de los ingresos correspondió a las entidades gestoras y servicios comunes de la Seguridad Social, y el 8,79% a las Mutuas de Accidentes de Trabajo y Enfermedades Profesionales.

En términos de caja, las operaciones no financieras recaudaron 19.008 millones de euros, un 0,54% menos respecto al mismo periodo del ejercicio anterior, mientras que los pagos aumentaron el 6,33%, hasta los 15.630 millones.

En cuanto a los gastos por prestaciones contributivas, a las pensiones (invalidez, jubilación, viudedad, orfandad y en favor de familiares) se destinaron 13.319 millones de euros, un 5,56% más.

La mayor partida fue para las pensiones de jubilación, con 8.912 millones, seguida de la de viudedad, 2.586 millones; invalidez, 1.597 millones; orfandad, 188 millones, y a favor de familiares 34 millones.

En cuanto a las pensiones y prestaciones no contributivas, ascendieron a 648 millones (el 3,36% más) y, de ellos, 333 millones correspondieron a prestaciones familiares (el 7,29% más).

Los gastos de gestión de la Seguridad Social (personal, corrientes o inversiones) disminuyeron el 2% en tasa interanual. De los ingresos no financieros, las cotizaciones sociales sumaron 17.636 millones, el 0,75% más que hace un año.