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VALENCIA. Después del éxito de las elecciones primarias abiertas impulsadas por los socialistas valencianos de la mano del secretario general del PSPV, Ximo Puig, llega el momento de empezar a plantearse progresar en otros objetivos relacionados con la participación: las grandes ciudades.

A priori, las resoluciones aprobadas en el último congreso federal del PSOE no permiten que se aborden primarias abiertas en los municipios. De hecho, tampoco venía contemplado explícitamente que pudieran organizarse en el ámbito autonómico. No obstante, y al no existir una reglamentación específica contraria, el empeño de los socialistas valencianos hizo abrir la mano a Ferraz en la conferencia política de finales de 2013 pese a la oposición de algunos dirigentes e incluso de varios barones regionales.

Ahora bien, trasladar a los aspirantes municipales este sistema abierto -que permite a cualquier ciudadano votar al candidato- es otro cantar. Aunque dirigentes como el portavoz local de Valencia, Joan Calabuig, ha insistido en su deseo de celebrar primarias abiertas, fuentes del PSPV consultadas por este diario coinciden en que es "muy complicado" conseguir 'luz verde' desde Madrid a un proceso de esas características dado que fue rechazado precisamente en la citada conferencia política, donde sí se abrió la posibilidad a celebrarlas para las candidaturas autonómicas.

No obstante, las citadas fuentes apuntan a un resquicio legal dentro de la formación que permitiría afrontar, de no conseguir una apertura total, unas primarias "semiabiertas" para la elección de candidatos locales: los simpatizantes podrían tomar parte del proceso según viene reflejado en las conclusiones de la conferencia política del PSOE. 

Así, en la votación podrían participar no solo los militantes, sino también los que hubieran marcado la casilla de 'simpatizante' durante el último proceso de primarias abiertas para la elección del candidato a la Generalitat, en las que se impuso Ximo Puig y en la que se inscribieron unas 53.000 personas de fuera del partido.

En este sentido, desde el PSPV ven factible que este sistema pudiera aplicarse para las tres capitales de provincia además de alguna localidad con una población elevada como Elche. De esta manera, y además de complicar la negativa de Ferraz, se fidelizaría a los participantes de las anteriores primarias y se abordaría un proceso que, dentro de sus limitaciones, ofrecería un plus al de las primarias simples. Una fórmula, y este es un detalle de peso, que también facilitaría el control de la cita electoral a los candidatos más próximos al aparato.