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VALENCIA. Pilar Almeria recibe este martes el reconocimiento del sindicato de actores valencianos (Actors i Actrius Profesionals Valencians) como reconocimiento a toda su trayectoria. Un extremo que a ella, irónicamente, le hace sonreír: "la verdad es que es una decisión extraña, porque he visto que antes se lo han dado a compañeros que están al final de su carrera... ¡yo estoy a mitad!", contesta a CulturPlaza.com.

La actriz valenciana que ha participado en innumerables montajes escénicos, que es directora del Teatre Micalet, una de las últimas trincheras del teatro en valenciano, y que además ha aparecido en televisión, algunas películas y hasta ha grabado dramáticos de radio en la tristemente extinta Ràdio 9, recibe así el reconocimiento de sus compañeros en una gala que supone el 25 anivrsario de la AAPV.

"Me hace especial ilusión recibir el premio en estos momentos tan duros que estamos pasando. Sentirme querida por mis compañeros es algo muy grande", apunta en una sensación muy compartida con el actor que en categoría masculina recibe hoy el mismo premio, Paco Alegre.

Almeria, que estuvo a punto de terminar sus estudios de biología, no se arrepiente de haber cambiado de opción profesional para abrazar -hace ahora tres décadas- la interpretación: "no me he arrepentido nunca de ese cambio. Fue la mejor decisión de mi vida, aunque no niego que hya tenido momentos de desánimo, pero me imagino que los hubiera tenido haciendo cualquier otra cosa.

La actriz valenciana reconoce que al hacer teatro "me siento muy bien y voy a seguir luchando por hacer lo que me apasiona". La situación de la profesión y de todas las industrias implicadas (teatral y audiovisual) es crítica en la Comunitat, con un próximoa "amateurización" de la profesión según ha previsto la propia AAPV que ha dejado dos premios desiertos como protesta por el cierre de Radiotelevisión Valenciana. "A veces no sé de donde saco las fuerzas, pero hacer teatro es para mi una necesidad vital", remata la actriz.

LA CRÍTICA SITUACIÓN DE LOS ACTORES Y EL CIERRE DE RTVV

Con respecto a ello, la actriz asegura que "existen buenos deseos, pero no nos queda mucho tiempo [de reacción]". Almeria señala a "la incompetencia y la falta de una planificación a largo plazo" como causas de lo que ya es "prácticamente la desaparición de todo un sector". Por ello, aprovecha para reclamar "una reacción rápida o bien un plan de futuro. El teatro se debe entender como un servicio público, como un bien para la sociedad". Aun así, reconoce que todos los agentes implicados están llamados a "inventar nuevas fórmulas y colaborar para tirar hacia delante".

En opinión de Almeria, "no es que RTVV haya mirado mucho por los actores, pero en los últimos tiempos se hicieron series que generaban trabajo y popularidad". En este sentido, Almeria cree que "los actores hacian series y eran queridos por la gente que iba a verles al teatro. Servía como plataforma de proyección, aunque en la Comunitat solo apso en algún caso puntual". La actriz tiene especial experiencia en el caso del doblaje: "aquí ha sido dramático. Prácticamente todas las empresas han cerrado y todos los actores de doblaje están sin trabajo". Preguntada sobre si desde la AAPV se debería hacer especial hincapié en que el ente público de radio y televisión se reabriera, ella asegura que el sindicato "se ha de implicar en un proceso para su reapertura, pero no de la misma forma en la que operaba".

Almeria, que esta tarde se dirigirá a sus compañeros con un discurso basado en la nostalgia y el amor por el oficio, el rigor en el trabajo y la colaboración y respeto entre las diferentes generaciones de la profesión, reconoce que "el teatro es la madre de los actores. No se puede comparar la sensación de respirar con el público a ningún otro medio". En este sentido, preguntada acerca de si este es un buen momento para 'estirar' del teatro popular, ella responde que "sencillamente, es un buen momento para el teatro. Es un buen momento para contar qué está pasando y ese es nuestro compromiso como artistas. El teatro es terapeútico".

El teatro en valenciano, que ella programa sistemátticamente y dirige en el Micalet, no se encuentra precisamente en un mejor momento con respecto al resto. "Hubo un momento en el que un gran número de compañías estrenaban en valenciano. Si se hubiera continuidado, ni estaríamos hablando de esto. Para mi es natural hacer teatro en mi lengua y el valenciano tiene un público deseoso de ver teatro en valenciano. Lo compruebo día a día en el Teatre Micalet y es una labor por la que el tiempo nos acabará dando la razón".

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