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¿Quién pasó las Fallas en Baqueira, lejos de las trincheras de las Fallas? Este año les diré que han sido muchos, muchísimos; entre ellos, el expresidente de Bancaja 

VALENCIA. Las Fallas, las verbenas, la música de las carpas es demasiado para mí. Bueno. Las Fallas, las verbenas, la música de las carpas... y las aglomeraciones. Sé que hay gente que es feliz rodeada de miles de desconocidos, sintiendo los apretones de la masa... Yo, ay, no puedo. Eso de estar rodeado de centenares de personas anónimas, empujándoles y empujando, intentando ver un monumento que se quemará en unos días, como que no.

Así que estas Fallas me alquilé unos esquís a la última y cargado y todo puesto subí a las pistas. Debo reconocer que esto del esquí es un poco tremendo. Entre lo caro que es y lo incómodo, no tardé mucho en aterrizar en la terraza, patrocinada por una conocida marca de champagne, que está en Orri. Creo que di en el clavo. Me aposenté y no paré de ver a valencianos que se tomaban su copita de champagne para descansar un rato.

Allí se dieron cita, entre muchos otro, las guapísimas hermanas Trinuca y Mireya Larraz, Javier Calvé, Javier Martínez Ochoa con su mujer, la doctora Murcia (otorrina), su hermano Kico Murcia con su novia Darina, el doctor Espí (traumatólogo) y su mujer Toti, Rafa Climent y su mujer Verónica, Chimo Maldonado y Sofía Carpi, José Luis Martínez Navarrete, socio director de Garrigues, los Calabuig, Celia y Eugenio, Rafa Aleixandre (que se lesionó en un hombro, el pobre) y Silvia Alonso con la pequeña Silvita, Pedro Muñoz y Juana Ballester, Rafa Pargo y Sol Ballester (de la pandi de Benicassim), Pablo Ríos y Ana Gil, Javi Lucas y su mujer Isabel, Facundo el del circuito y un largo etcétera. Esta vez creo que no me he olvidado a nadie. He hecho los deberes bien, que últimamente me andaban riñendo un poco....

Lo confieso, esquié más bien poco... o casi nada, vamos. A mí esto del frío no me va y el deporte menos todavía. De hecho sólo bajé una pista, pero me dio para ver esquiando a las hermanas Aliaga, Mónica, Paula y Belén, junto con sus respectivos, Manel Casanova, Vicente Peris y Juan Luis Serratosa, todos ellos con sus respectivas proles. También me crucé por las pistas a Rudi Beltrán Martinavarro y a su mujer Luisa, a Ramón Rodrigo, Francisco Villalonga y a Chema Yagüe, a Alfonso Maldonado con su mujer Lucía de Miguel y Julio de Miguel padre. Los de Miguel parece que estaban al completo, porque también me crucé con Javi de Miguel y con su mujer Carmen Noguera.

Mi alojamiento, ya que tomé la decisión de huir casi a última hora, fue en Viella. Paseando por el pueblecito pude ver a Joserra García Fuster y a su mujer Briana, que por cierto, también se había lesionado, no sé si esquiando o no, o tal vez incluso antes, pero iba escayolada. También me crucé por la avenida principal de Viella a José Luis Olivas que iba charlando con Ángel Álvarez (¿de qué hablarían? ¿Tiempos pasados en Bancaja?). A otros que me crucé fue a Jorge García del Moral y a su mujer.  

Uno de mis días del refugio fallero, me acerqué a comer al Cinco Jotas en la cota 1.800m (ya parezco profesional y todo con esta terminología). Estaban también comiendo allí Javier Aguirre, Bárbara de Quesada, Fidel García Guzman y su mujer Mónica, Constanza de Miguel y Toni Ballester Martinavarro. También pude ver por allí al matrimonio de registradores Manolo Montánchez y Gemma Reig.

Seguí con mi ruta de cafeterías garitos varios por las pistas. En uno de ellos vi a Ico López Guardiola, Luis Donderis y Vicente Atard con su mujer Paloma.

El último día, aconsejado por varios valencianos de Baqueira de toda la vida, me pasé por la carnicería francesa Aunos, hice la larguísima cola, y me llevé un solomillazo de quitar el hipo para regalárselo a mi madre, que no me perdona que la haya abandonado y no haya ido con ella a Fabián a tomar buñuelos de calabaza este año.