X AVISO DE COOKIES: Este sitio web hace uso de cookies con la finalidad de recopilar datos estadísticos anónimos de uso de la web, así como la mejora del funcionamiento y personalización de la experiencia de navegación del usuario. Aceptar Más información
Martes 16 abril 2024
  • Valencia Plaza
  • Plaza Deportiva
  • Cultur Plaza
culturplaza
Seleccione una sección de VP:
activos especiales

Felipe Pantone, la celebridad graffitera 'from Valencia' a la que no se le pone cara

VICENT MOLINS. 08/03/2014 Protagoniza exposiciones en Tokio, París o Bangkok. Nunca muestra su rostro pero su trabajo, circundando el graffiti, ha impactado a marcas como Nike o Red Bull

VALENCIA. Este viernes en Tokio Felipe Pantone inauguró (o eso estaba previsto, salvo catástrofe) la exposición Perpetuum Mobile, con el apoyo de la embajada de España. Después estará en Osaka. La semana pasada se bajó en París, mostrando las trazas de su oficio en la galería Open Space. En los últimos meses ha rodado por Bangkok, Ámsterdam, o Rotterdam. Todavía está en edad de Carnet Jove, pero desborda sus propias previsiones mutando en figura pública de galerías y muestras; un tótem graffitero. Pone por ahí que cumple con la función de enfant terrible de Valencia. Exageraciones. Más bien es uno de los miembros más luminosos de la nueva creatividad de la ciudad. Aunque, no es necesario ni introducir el matiz, sus réditos llegan de fuera.

Está en una habitación de un hotel del barrio de Shinjuku, Tokio. Desde el desfase horario, se presenta: "soy Felipe Pantone, hago graffiti y mis temas siempre son la omnipresencia, la universalidad y la relación con esta época ultra rápida de internet, de aviones, de productos y actividades desechables y de modernidad líquida".

Protagoniza el momento en el que el graffiti se ha convertido en una técnica común en las galerías de arte y museos; obras con un valor in crescendo. "Es una técnica más, simplemente", aporta María Tinoco, directora de Mr.Pink (Guillem de Castro, 110, Valencia), un espacio que intuye bien a los nuevos valores. En 2007 Tinoco encontró a Pantone en la calle, pintando muros, y decidió que sería él quien protagonizaría la primera exposición en la historia de Mr.Pink. "Creo", valora, "que a nuestro alrededor, e incluso entre muchos de los que lo conocen, no se acaba de entender la dimensión que tiene Felipe".

"Es toda una referencia mundial del graffiti", se lee. "Es un titán del estilo". Ok, pero, ¿de dónde ha llegado Pantone? "Emigré con mis padres desde Argentina cuando tenía 10 años, por circunstancias económicas. Yo vivía en Buenos Aires y aterrizamos en Torrevieja. Fue un cambio bastante brusco".

Como terapia a la brusquedad, comenzó a intimar con la llamada artística. "Siempre se me dio bien dibujar, aunque de pequeño nunca tuve relación con el Arte, con mayúscula. En mi casa no se sabe muy bien de qué va. Y después de varios años pintando graffitis mi madre estaba empeñada en que estudiara una carrera. Le hice el lío para hacer Bellas Artes, en Valencia. Pasé por la carrera sin pena ni gloria, pintando bodegones con amargura y pintado en la calle con gusto. Ahora, volviendo la vista atrás, supongo que me dio algunas nociones de lo que es el arte y maneras de profesionalizarlo".

Felipe Pantone, la muestra evidente de cómo una técnica, la del graffiti, considerada suburbial por tantos, se ha convertido en estrella expositiva y comercial, sigue en la habitación de su hotel de Tokio. "Siempre tengo la sensación de que en Japón sólo te pueden pasar cosas buenas. Hay un hostión cultural a todos los niveles". También tenemos varias cuestiones por resolver. Primero, el porqué de su trascendencia. "Es un caso atípico", razona Maria Tinoco. "En su disciplina artística es mucho más difícil tener repercusión internacional, y él lo ha conseguido".

–¿Tu alcance es global porque no podía ser local?

–Creo que pasa cuando lo que haces es algo muy específico. Si por ejemplo fueras director de cine e hicieras dogma desde España en la actualidad, creo que tu mercado habría de ser global; sería complicado vendérselo a la Conselleria de Cultura.

Nike y Red Bull (y Schweppes, Licor 43...) se presentaron en el zaguán de Pantone para reclamarle chutes de adrenalina estética. "Nike quería unas colecciones de camisetas, con un diseño bien ejecutado. Para Red Bull hice un mural en Alemania. Supongo que querían promocionar la marca...". Algunos de sus conocidos razonan su protagonismo: "encarna muy bien la geometría más clásica o el op-art trasladados a la cultura popular del graffiti pero en su lenguaje más actual", explica la comisaria Cristina Chumillas. "De manera inconsciente", cuenta José Martí, miembro de Kostrok, "uno espera escuchar frivolidades y adornos en una persona que habla de su arte, pero de él sorprende la forma tan directa y honesta que tiene de hablar de cualquier cosa. Tiene una energía inagotable".

Si sus obras se pronunciaran, hablarían la superviviencia en esta época ultra rápida, del caos de la exactitud, donde todo parece deshechable pero al mismo tiempo infinito gracias a internet. "Creo que la era digital supone un cambio total en todas las disciplinas. Si antes había que consultar la información en el foro romano o en el ágora griega, y con la imprenta se pudo reproducir la información X veces, con internet esa misma información se reproduce al infinito, de manera instantánea. Si necesito hacer un vídeo, habrá un mexicano que me lo explique en Youtube. Esto es sustancialmente importante. Cuando empecé a pintar graffiti no había información y me costó meses enterarme de que habían diferentes válvulas. Mis padres flipaban porque sabía cambiar las pilas de mando a distancia y ahora mi sobrina de tres años maneja el iPad mejor que yo".

El rostro de Pantone nunca aparece en fotografías públicas. Es un celo por la identidad propia especialmente habitual entre aquellos formados en el graffiti. ¿Se trata de una medida preventiva ante la autoridad?, ¿pretenden que sea la obra la que prevalezca sobre cualquier otra cosa?, ¿buscan conferirse misterio?, ¿es un desafío a las leyes mediáticas?

–Felipe, ¿por qué es?

–Si te refieres a la identidad de los autores, supongo que como comentas es por protección legal, y porque nuestra cara tiene bastante poco interés. También porque, aun siendo su espacio el espacio público, el graffiti es de nosotros para nosotros. Son 40 años de estilos muy encriptados.

Y así, emitiendo señales encriptadas, en medio de un halo de misterio, dejará dentro de unos días su habitación de hotel, viajará a Osaka y terminará regresando a casa. "Valencia está en un buen momento creativo", remata. Es Felipe Pantone, una celebridad graffitera.

Comparte esta noticia

comentarios

Actualmente no hay comentarios para esta noticia.

Si quieres dejarnos un comentario rellena el siguiente formulario con tu nombre, tu dirección de correo electrónico y tu comentario.

Escribe un comentario

Tu email nunca será publicado o compartido. Los campos con * son obligatorios. Los comentarios deben ser aprobados por el administrador antes de ser publicados.

publicidad
publicidad
C/Roger de Lauria, 19-4ºA · Google Maps
46002 VALENCIA
Tlf.: 96 353 69 66. Fax.: 96 351 60 46.
redaccion@valenciaplaza.com
quiénes somos | aviso legal | contacto

agencia digital VG