A. MOHORTE. 04/03/2014 Las firmas de Amancio Ortega y Isak Andic ultiman la apertura de tres nuevos centros en la misma calle

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VALENCIA. El próximo jueves abre sus puertas en Valencia la nueva tienda de Bershka en la antigua sede de la Conselleria de Economía de la calle Colón, 32. La operación fue un auténtico pulso entre los hombres de Inditex y el equipo de Mango, con visita al inmueble incluida del principal accionista de la segunda, Isak Andic, aunque fue la firma de Amancio Ortega la que terminó por cobrarse la pieza.

Sin embargo, esta batalla no ha significado el fin de la guerra. Con unas previsiones de recuperación para el consumo que apuntan a 2015 como el año clave, las grandes marcas han empezado a tomar posiciones ahora que los arrendamientos siguen contenidos y los propietarios tienen que enfrentar sus expectativas a largo plazo con la voluntad de ocupar los locales a corto.

La respuesta de Mango ha sido rápida, concretándose a mediados de enero con el alquiler del bajo más caro de la calle: la esquina de la plaza de los Pinazo, 2, frente a El Corte Inglés, para su marca de tallas grandes Violeta by Mango. La posición compensa el tamaño, según los expertos, ya que el tránsito ante las puertas del nuevo Mango es superior, aunque el efecto de colocar juntos el nuevo Bershka y el establecimiento de H&M incrementará el atractivo de su acera.

APERTURAS A LA CARRERA

Además, hace unos días que Inditex ha cerrado también el bajo del número 22 de Colón para un nuevo Stradivarius, que prevé tener abierto para la campaña de verano. De este modo, la firma gallega refuerzará aún más su control comercial de la vía, al margen de la demostración de fuerza que dio con la compra del edificio de Apple, aunque en ese caso su objetivo es ser casero de la marca de la manzana, a traves de la división inmobiliarias del grupo, Pontegadea.

Actualmente, Inditex explota 18 locales en el triángulo que forman las calles de Colón, Don Juan de Austria y el paseo de Ruzafa. Esta presencia es más discreta que la de Mango, pese a que este que cuenta con cinco establecimidentos, debido a la variedad de nombres con los que trabajan los gallegos, en función de los públicos a los que va destinado.

Sólo en la calle Colón, la cadena de Amancio Ortega cuenta con dos Zara, la división de referencia de la empresa con oferta para mujer, hombre e infantil; dos Massimo Dutti; otros dos Stradivarius y dos Bershka (incluyendo los nuevos); un Pull & Bear; un Uterqüe; un Oysho; y un Zara Home, destinado al textil hogar. 

En Don Juan de Austria, a la reciente apertura del nuevo Pull & Bear de la esquina con Pascual y Genís se suman dos Zara y un Massimo Dutti. Por último, en Paseo de Ruzafa la cadena ha abierto otros dos centros más, un Zara y un Bershka.

Por contra, Mango dispone en éste área de dos establecimiento genéricos, uno en Colón y otro en Don Juan de Austria; además de un H.E. Mango, otro Mango kids y el nuevo Violeta, junto a El Corte Inglés. A ellos se prevé sumar, ya en la calle Xàtiva, la apertura prevista en la Finca de hierro.

A la zaga le sigue el grupo Calzedonia, que, a través de sus enseñas Calzedonia, Intimissimi y Tezenis ya dispone en la misma zona de otros cinco centros, más reducidos en tamaño que los de Inditex y Mango y orientados sólo a la ropa interior, un productos secundario en la oferta de sus competidores españoles.

DEFINICIÓN DE NUEVOS PÚBLICOS

Es significativo el establecimiento de marcas en función de los públicos, ya que definen en líneas generales el tipo de público mayoritario en cada parte. Así resulta significativo que en los primeros números de Colón exista una mayor presencia de las marcas juveniles Bershka, Stradivarius y Pull & Bear de Inditex.

Por contra, en el entorno de El Corte Inglés se agrupan las orientadas a un mercado de edad más madura como es el que busca Violeta by Mango, Uterqüe (Inditex) o, al margen de estos grupos, Cortefiel e Intimissimi (Calzedonia). Desde un punto de vista comercial, esta diferencia de estilo no está directamente relacionada a una diferencia de precios de arrendamiento.

La calle Colón mantiene los alquileres más altos, en una media de 100 euros el metro cuadrado. Aunque todo es negociable y matizable, ya que el arrendamientos depende de las expectativas del propietario y baja considerablemente en las inmediaciones de la Porta de Mar, mientras que suben en la parte del Paseo de Ruzafa.

La apertura de un centro de la multinacional Primark en la calle de Ruzafa ha orientado esa zona a tiendas que centran especialmente su valor en el precio. Sin embargo, no todo vale, como se pudo apreciar en el caso del C&A del antiguo cine Capitol, que cerró el pasado verano tras año y medio de actividad.