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Valencia, 18 feb (EFE).- El acto de conciliación previo a la demanda de la edil socialista de Orihuela Carolina Gracia contra el president de la Generalitat, Alberto Fabra, por unas declaraciones que realizó sobre la moción de censura en el Ayuntamiento oriolano ha concluido hoy sin acuerdo.

El president de la Generalitat no ha acudido al acto celebrado en el juzgado de primera instancia número 19 de Valencia (la Ley no exige su presencia) y ha sido representado por su letrado, quien ha alegado que las declaraciones de su defendido "en modo alguno" podían ser consideradas injuriosas o calumniosas, y que "faltan elementos constitutivos de los delitos" que le atribuye Gracia.

Las manifestaciones aludidas por la concejala socialista son las que efectuó Fabra en la rueda de prensa posterior al pleno del Consell del pasado 3 de enero al ser preguntado por la decisión de la mesa de edad del pleno de Orihuela de rechazar la tramitación de la moción de censura presentada por el PP y dos ediles del CLr contra el gobierno local (PSPV y Els Verds).

El president de la Generalitat aseguró que negarse a realizar la moción de censura en Orihuela, a pesar de conocer que estaba avalada por un informe del secretario municipal, era "prevaricación" y advirtió de que las personas que lo habían decidido tendrían que "dar cuenta a la Justicia". Gracia formaba parte de la mesa de edad.

Estas declaraciones de Fabra motivaron que Gracia interpusiera el pasado 8 de enero una demanda de conciliación en defensa de sus derechos en los juzgados, previa al ejercicio de las acciones pertinentes por "calumnias e injurias" contra el president de la Generalitat, para que se retractase de esas palabras.

Gracia ha ratificado hoy en el acto de conciliación su demanda, en la que pedía a Fabra que reconociera que las manifestaciones vertidas en la rueda de prensa fueron "calumniosas e injuriosas" y se retractara públicamente de las mismas. Reclamaba asimismo una indemnización por los "daños y perjuicios", ya que asegura que las palabras del jefe del Consell le han supuesto un "grave ataque a su honor" que le ha ocasionado un daño moral personal.

Según la concejala socialista, además, "no se corresponden con la realidad" y son "contrarias a la propia regulación legal de la moción de censura". El letrado de Fabra, por su parte, ha manifestado que las declaraciones de su defendido fueron formuladas "en clave política con expresa remisión y sometimiento a las decisiones judiciales", y que se fundamentan en un informe jurídico del secretario del Ayuntamiento de Orihuela.

Ha añadido que "en modo alguno son injuriosas o calumniosas", y que "faltan elementos constitutivos de los delitos" que le imputa la demandante. El acto de conciliación, instado por la edil socialista, es un trámite obligatorio antes de interponer una querella por injurias, informa el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana.

Gracia ha manifestado tras el acto que "es una falta de respeto a la ciudadanía aprovechar el cargo de presidente de la Generalitat para entrar a hacer una valoración política del tipo que hizo y aprovechándose de la rueda de prensa del Consell".

En dichas declaraciones, ha añadido la concejala, Fabra "nos acusa a los miembros de la mesa de edad, y a mí personalmente, de la comisión de un delito de prevaricación, que nos llevó a presentar esta demanda". "Ante la no avenencia a este acto seguiremos el trámite normal de interponer la demanda pertinente para que siga el procedimiento", ha asegurado.