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VALENCIA. Valencia sigue sin ser un lugar de referencia para hablar de Joaquín Sorolla. Una gran exposición dedicada al pintor valenciano abrirá sus puertas este viernes 13 de diciembre en el museo Meadows de Dallas, donde se podrá contemplar hasta el 19 de abril de 2014. La misma incluye cuadros conocidos como ‘Triste herencia', que ha cedido la fundación Bancaja, así como obras que nunca habían visto la luz pertenecientes a coleccionistas privados estadounidenses.

El proyecto recibe por título Sorolla y América y es una de las grandes citas invernales en la ciudad texana. Ha sido organizado por el museo Meadows, el Museo de San Diego y la Fundación Mapfre. Tras su paso por Dallas, viajará a San Diego donde se podrá contemplar desde el 30 de mayo de 2014 hasta el 26 de agosto, y después recalará en la sede de la Fundación Mapfre en Madrid donde se exhibirá desde el 23 de septiembre de 2014 hasta el 11 de enero de 2015.

No está previsto que se exhiba en Valencia. Entre los motivos que han hecho que la ciudad natal del pintor sea de nuevo obviada, se halla el que "se trata de una muestra por parte de tres organismos y eso complica mucho los traslados y préstamos de las obras", según explicaron este domingo fuentes de la Conselleria de Cultura.

Igualmente, apuntaron que, aunque el calendario está cerrado, existe una mínima posibilidad de que en el transcurso del año que viene se pueda acordar que, si no toda, gran parte de la exposición pueda finalmente recalar en Valencia; aunque admitieron, es más "un deseo que una posibilidad". Porque, a día de hoy, la ciudad española de referencia para hablar de Sorolla es Madrid, donde está la Casa-Museo del pintor valenciano. 

Sorolla y América tiene como fin aproximar al público actual la repercusión que tuvo el pintor valenciano en la sociedad estadounidense de su tiempo, desde el día en que expuso por primera vez, en 1909, en la Hispanic Society. 

La comisaria es la bisnieta del pintor Blanca Pons-Sorolla, quien ha seleccionado el más de un centenar de pinturas que se exhibirán. Entre ellas se incluye un número significativo de trabajos de la Hispanic pero también, y sobre todo, otros en manos de coleccionistas privados que hasta ahora habían permanecido inéditos. Son las obras a descubrir.

La tesis que mantiene Blanca Pons-Sorolla es que si el éxito de Sorolla fue "absolutamente arrollador", fue porque el público americano se identificó "profundamente" con "su optimismo y su fuerza, con su modo de ver y sentir la pintura".

Para dejar patente esa fama y relevancia, en la muestra que se inaugura este viernes en el Meadows se exhiben los retratos que realizó por encargo a las personalidades más influyentes de la sociedad americana de entonces, desde la familia Morgan hasta William Howard Taft, presidente de los Estados Unidos. 

Pero también, junto a esta nutrida producción, se podrán contemplar sus famosas grandes escenas de playa, y sus patios y jardines con los que enamoró a la sociedad americana, y también el primer gran cuadro que vendió a EE.UU., '¡Otra Margarita!', una pintura reconocida con la medalla de la Columbus Exhibition de Chicago de 1893 y que fue adquirida ese mismo año por la Washington University de Saint Louis.

SOROLLA HASTA EN LA TIENDA

La apuesta del museo Meadows por esta exposición es absoluta y ha convertido a Sorolla en el leit-motiv de su campaña navideña. Para eso ha habilitado espacios en su tienda para la exhibición de productos inspirados en la obra del artista valenciano. Fruto de esa iniciativa, dos profesionales valencianos, la diseñadora Marta de Diego y el joyero Vicente Gracia, han entrado en el Meadows. De Diego ha diseñado complementos de ropa mientras que Gracia ha hecho lo propio con joyas de inspiración marina.

No es la única acción de ambos en la ciudad de los petrodólares. La exclusiva cadena de tiendas de lujos Neiman Marcus, cuya sede central se encuentra precisamente en Dallas, les ha dedicado a ambos sendos espacios para exhibir sus creaciones. En el caso de De Diego se trata de once vestidos valorados entre 18.000 y 20.000 dólares, mientras que en el de Gracia serán 41 joyas de oro, plata y piedras preciosas como rubís, turquesas, ópalos u ópalos de fuego. La presentación tuvo lugar el pasado viernes y estarán allí expuestas y a la venta.

Ambos reconocen que su presencia en EE.UU. ha sido en parte gracias a Janet Kafka, cónsul de España en Dallas, ya que fue ella quien diseñó esta maniobra "muy bien orquestada" que ha aunado cultura y artesanía a partes iguales y que se aprovecha del tirón de Sorolla, el primer valor de la marca Valencia en el mundo, para ir abriendo nuevos e inesperados mercados. Una Kafka que ha estado siempre detrás de toda esta operación y que, por ejemplo, visitó este verano Valencia para asistir a la firma del acuerdo gracias al cual 'Triste herencia' viajaba a EE.UU.

Kafka, descendiente del escritor, es una gran amiga de la que fuera secretaria de Cultura de la Generalitat, Concha Gómez. Es una apasionada de España y de Valencia y por mediación de Gómez trabó relación con un pequeño grupo de profesionales valencianos que ya han ido participando en algunas actividades en esa ciudad estadounidense. 

UN LOBBY CÍVICO VALENCIA-DALLAS 

De Diego y Gracia son las cabezas visibles de un lobby que se hace llamar a sí mismo Comité Ciudadano por Valencia-Dallas y que, además de ellos, incluye a Federico Pallardó, Santiago Borrás, Javier Planes yJuana Roig. Ambos creen que Dallas puede ser una buena puerta de entrada para los profesionales valencianos.

"Aquella es una sociedad muy rica, muy receptiva con todo lo español; no es tan snob como la sociedad neoyorquina", dice de Diego. "Además, un 40% de la población habla español", añade Gracia. Una iniciativa "civil" que ha surgido, insisten, al margen de la administración y que hará que si Sorolla no viene a Valencia, al menos Valencia sí irá a Dallas.