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Tres siglos de moda, pintura y escultura 'okupan' el San Pio V

VALENCIAPLAZA.COM. 07/11/2013 La muestra 'Moda ¿Octavo arte? Arte e indumentaria de la Revolución francesa a la Belle Epoque' reccorre 300 años de evolución en la historia del arte FOTOGALERÍA

VALENCIA. El Museo de Bellas Artes San Pío V de Valencia reúne en una exposición moda, pintura y escultura para recorrer tres siglos de evolución en la historia del arte pero, también, de la sociedad, desde el siglo XVIII hasta la década de los 20 de la pasada centuria, desde la opresión del corsé hasta la liberación "en la indumentaria y en la mente de las mujeres".

Así se ha puesto de relieve en la presentación de la muestra 'Moda ¿Octavo arte? Arte e indumentaria de la Revolución francesa a la Belle Epoque', que ha estado a cargo de la directora de la pinacoteca, Paz Olmos, y los comisarios del proyecto, la indumentarista Victoria Liceras --que ha prestado los trajes que se pueden contemplar en la selección-- y Ximo Lara.

Este recorrido por el diseño y las artes plásticas se ha construido a partir de 24 pinturas y cuatro esculturas de los fondos del museo firmadas por grandes creadores, como Agustín Esteve, Vicente López, Zacarías González Velázquez, Vicente Rodés, José Madrazo, Salvador Martínez Cubells, Antonio Cortina, Ignacio Pinazo Camarlench, Emilio Sala, José Benlliure, Joaquín Sorolla, Cecilio Pla, José Mongrell, José Pinazo o Amadeo Roca.

Entre las piezas, destaca una decena que han sido restauradas, nueve de ellas inéditas y recuperadas gracias a esta exposición para el patrimonio valenciano. Las más importantes son una de Antonio Cortina i Farinós y otra de Vicente Borrás Mompó. También se ha restaurado un bello retrato anónimo que se encontraba en muy mal estado y cubierto de barro.

Asimismo, la exposición, que podrá visitarse hasta el próximo enero de 2014, incluye numerosas curiosidades y guiños a la época con piezas simbólicas como la bailarina de Beltrán Grimal, ejemplo de la mujer libre, una escultura que casi nunca se ve.

Todas estas obras dialogan con los fondos aportados por Victoria Liceras, entre los que hay curiosidades como un traje de infante "único en las colecciones españoles", un modelo de Fortuny de 1910 y un impresionante vestido de novia donado por la Casa Real a una familia valenciana de la época.

Gracias a este material, la muestra refleja la evolución de la indumentaria, especialmente los cambios de la silueta femenina, desde el encorsetado siglo XVIII, la liberación del estilo imperio durante la primera quincena del siglo XIX, o la vuelta del corsé durante el romanticismo y hasta casi el final del siglo.

 

SISSI Y EUGENIA DE MONTIJO

De este modo, se pone de relieve la influencia que figuras femeninas decimonónicas como la emperatriz Sissi o Eugenia de Montijo tuvieron en la indumentaria de la segunda mitad del siglo XIX. También cómo, el final de esta centuria, supone el comienzo de la definitiva liberalización de la mujer con el incipiente acortamiento de las faldas e incluso el corte del pelo, hasta entonces impensable.

Este periodo histórico representa un momento muy importante para comprender el estilo de vida contemporáneo, ya que representa una ruptura con la indumentaria tradicional y el comienzo de la moda tal y como se conoce hoy en día.

Las explicaciones que acompañan a la selección ayudan también a conocer a dos nombres clave en la evolución de la moda. El primero de ellos es Mariano Fortuny y Madrazo (1871-1949), hijo del pintor y pintor él mismo, inventa un tipo de brocado impreso que imita los terciopelos labrados de los siglos XV y XVI, diseñando además vestidos y ropa teatral con ellos.

Las grandes damas parisinas suspiraban por "les robes Fortuny", como cuenta Marcel Proust en su novela 'En busca del tiempo perdido'. Inventa también un tipo de plisado sobre finísima seda, con el que ejecuta su famoso vestido Delphos, parecido a una clámide clásica, destacan los impulsores del proyecto expositivo.

Por su parte, Paul Poiret (1879-1944) liberó a la mujer del corsé, y es para muchos, frente a Christian Dior, el Picasso de la moda. Luego vendrían Elsa Schiaparelli, Cocó Chanel y el mismo Dior, los modistas ya tenían nombre.

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