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VALENCIA. Los derechos del Banco Sabadell sufrieron una caída del 12,50% el pasado viernes, último día que cotizaban tras acabar en los 0,147 euros, lo que les convirtió en el peor valor de todo el Mercado Continuo; mientras que la acción recortó un 4,34% hasta los 1,851 euros para ser la séptima compañía más castigada del parqué.

Un serio revés que limitó las ganancias de ambos -computando los dos cierres- hasta un 0,10% durante la ampliación de capital, dado que el cupón se ha revalorizado un 14,84% y la acción se ha dejado en el camino un 0,91%.

Un poso amargo en una ampliación que, según los expertos consultados por este diario, ha cumplido -y con creces- el objetivo de superar los 1.300 millones de euros en los dos tramos (institucional y minorista) para aumentar la solvencia de la entidad presidida por Josep Oliu.

ACCIONISTAS CAM

Habrá que esperar a que la entidad informe a través de un hecho relevante a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) del balance de la misma, pero a priori pocos son los que dudan del éxito de la misma.

Grandes y pequeños accionistas del Banco Sabadell (SAB), incluyendo a un buen número de los 60.000 accionistas procedentes de la extinta Caja Mediterráneo (CAM), han acudido a una ampliación de capital que ha reforzado el balance de la entidad vallesana.

De ahí los espectaculares volúmenes de negociación que se han visto durante las dos semanas que ha durado esta operación.

VOLÚMENES DESCOMUNALES

Sin ir más lejos, el pasado viernes se intercambiaron más de 50 millones de 'sabadeles' -sin incluir los casi 485 millones de derechos-, lo que representa cinco veces por encima de la media diaria anual según los datos oficiales de Infobolsa.

"Ha habido mucho interés por la ampliación, tanto por entrar en ella a través de la acción como del cupón y buena prueba son los volúmenes de contratación que se han negociado durante la misma", apuntan las mismas fuentes. "Cierto es que en una operación como ésta siempre hay un componente especulativo, pero a grandes rasgos el Sabadell se puede dar por satisfecho", añaden.

ESTAMPIDA BAJISTA

Una ampliación que ha dejado bien a las claras que al valor le queda recorrido al alza en bolsa y buena prueba de ello es la estampida de los bajistas de turno con nombres y apellidos ante el buen trabajo realizado por los responsables del banco, con su consejero delegado a la cabeza Jaume Guardiola.

Como también el respaldo de entidades de reconocido prestigio mundial a la hora de incrementar su participación en el capital de la entidad vallesana como fue el gigante norteamericano de la inversión BlackRock, que desveló ante la CNMV haber superado el umbral del 3%, tal y como informó este diario.

Así, y a lo largo de la ampliación de capital, se conoció que actualmente sólo le queda un bajista reconocido dentro de su accionariado.

'CORTOS' A LA FUGA

Se trata del británico Marshall Wace, que ostenta un 0,52% del capital del SAB, según la información recogida por Valencia Plaza de la base de datos pública de la CNMV.

Sus otros dos bajistas con nombre y apellidos, los estadounidenses Discovery Capital Management y Wellington Managment Company ya no aparecen, lo que significa que bien se han ido o que cuentan con una participación inferior del 0,5%, que es el umbral mínimo obligado a desvelar ante el organismo supervisor.

Además, las posiciones cortas totales se han reducido en los últimos meses hasta el 1,99%, mínimo desde finales de enero pasado, cuando hace tres meses llegaron a controlar el 5,04%. Todo un detalle a tener en cuenta de cara al futuro más inmediato como también que el préstamo de acciones -la antesala de las posiciones cortas- alcanza el 10% del capital del SAB.