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MADRID (EP). La Fiscalía Anticorrupción se ha opuesto hoy a que el socio de Deloitte Francisco Celma, encargado de auditar las cuentas de Bankia, sea llamado a declarar en calidad de imputado, al considerar que ya lo hizo "extensamente" como testigo y que "por el momento" no procede modificar su condición procesal.
En un escrito al que ha tenido acceso Efe, remitido al juez de la Audiencia Nacional Fernando Andreu, que instruye el "caso Bankia", el Ministerio Público responde así a la petición formulada en este sentido el pasado mes de julio por la Confederación Intersindical de Cajas (CIC).
La CIC basaba su solicitud en el expediente sancionador que el Instituto de Contabilidad y Auditoría de Cuentas (ICAC), dependiente del Ministerio de Economía, abrió a Deloitte por dos faltas muy graves y dos graves en la auditoría de las cuentas de la salida a bolsa de Bankia.
Al presentar su petición, el sindicato señaló en una nota de prensa que, según el ICAC, Deloitte tenía clasificada a Bankia como una "empresa con pérdidas o en punto muerto o con bajo nivel de rentabilidad" mientras trabajaba en la auditoría de las cuentas semestrales previas a la salida a bolsa de la entidad.
La Fiscalía responde ahora que, "sin perjuicio de las conclusiones que queda extraer del expediente sancionador, todavía no concluido, así como de las diligencias pendientes de practicar, señaladamente la pericial encomendada a los peritos judiciales del Banco de España, no se juzga necesaria una nueva declaración de Francisco Celma".
Anticorrupción añade que éste, que compareció ante el juez el pasado mes de febrero, "ya ha prestado una extensa declaración en calidad de testigo en estas diligencias sin que proceda, por el momento, modificar dicha condición procesal".
Celma aseguró ante Andreu que no avaló las cuentas de Bankia aprobadas por el equipo de Rodrigo Rato en marzo de 2012 porque los entonces consejeros no se las presentaron firmadas, tal y como exige la ley.
Además, señaló que Deloitte alertó a los miembros de los Comités de Auditoría del grupo, a la dirección y al supervisor de la situación de la entidad y de sus problemas de viabilidad futura.
Al final los de Deloitte van a salir impolutos e indemnes de este tema de Bankia. Tienen mucho poder y acceso a gente muy importante. Imputarles sería como un mancha a su honorabilidad. España no es Reino Unido. Alli esta semana, han metido 16 M de euros de multa a Deloitte por no ser independiente y al socio que firmó, tres años de inhabilitación. Luego nos rasgamos las vestiduras con que en el exterior no nos tienen credibilidad. Ésta se gana con decisiones así, sin que tiemble el pulso. Y a los perjudicados con las acciones de Bankia, que se joroben.
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